¿Quieres caminar por el espacio? Puede que te cueste más que dinero

Un empresario judío de armas y tecnología se ha convertido en el primer profano en realizar una caminata espacial. A cientos de millas sobre la Tierra, Jared Isaacman participó en una compleja actuación de ciencia e ingeniería que a menudo conlleva algunos riesgos graves para la salud, incluso para los astronautas profesionales.

SpaceX de Elon Musk se asoció con Isaacman para dar vida a la misión Polaris Dawn, que incluyó un vuelo de cinco días a 460 millas sobre el planeta. Desde bultos en el sello de la escotilla hasta un botón que no respondía para acceder a la nave, hubo algunos fallos durante la caminata. Pero la «riesgosa aventura», como lo expresó el vicepresidente de construcción y confiabilidad de vuelo de SpaceX, Bill Gerstenmaier, podría haber sido mucho peor.

«Tienes que aceptar la situación», dijo el astronauta de la Agencia Espacial Europea Luca Parmitano a NPR.

«En un momento durante la caminata espacial, vas a tener calor, vas a tener frío, te van a doler las manos», continuó.

Durante una caminata espacial en 2013, el sistema de refrigeración de Parmitano sufrió una falla importante: su casco se estaba llenando de agua, subiendo por su piel y sobre su cabeza debido a la presión capilar en gravedad cero.

«Me cubrió los ojos, me cubrió los oídos, se metió en la nariz», dijo. Luego, su radio dejó de funcionar.

«Estaba solo, aislado», continuó. «No podía ver nada, no podía oír, no podía hablar».

Sin embargo, Parmitano no fue el primero en sufrir fallas importantes y potencialmente peligrosas durante una caminata espacial. Los astronautas han estado superando peligros similares durante años.

«De las nueve EVA que tuvieron lugar durante el proyecto Gemini, tres de ellas terminaron antes de tiempo debido a preocupaciones sobre la salud y la seguridad», dijo Emily Margolis, curadora del Museo Nacional del Aire y del Espacio Smithsonian, hablando sobre las caminatas espaciales (EVA) de la década de 1960.

Gene Cernan se encontró casi incapaz de moverse durante una aventura en el vacío durante Gemini 9. El revestimiento metálico de su traje restringía su movimiento más de lo previsto, y el interior del traje se estaba calentando rápidamente.

«Empezó a sudar profusamente y la humedad del traje comenzó a empañar su visor», dijo Margolis. El calor y la extenuante batalla contra el traje resistente al movimiento le costaron a Cernan 13 libras.

«Se cree que la mayor parte de eso era peso de agua por la cantidad de sudor que estaba haciendo durante esta EVA», agregó Margolis.

Pero eso fue hace décadas. ¿Qué tan peligrosas son las caminatas espaciales hoy en día? Según el Dr. Jonathan Clark del Baylor College of Medicine, ex consultor de la NASA y SpaceX, aproximadamente el 20% de las caminatas espaciales encuentran problemas.

Pero, ¿los legos, aquellos sin experiencia o entrenamiento adecuado en caminatas espaciales, podrán corregir fallas importantes tan bien como los astronautas probados y comprobados como Parmitano?

Para regresar sano y salvo a su transbordador después de que su casco comenzó a llenarse de agua, lo que lo dejó ciego, tuvo que volver a recorrer de memoria sus pasos hasta la esclusa de aire.

«No me atribuyo ningún mérito específico por mantener la calma, porque me habían entrenado durante toda mi vida adulta para actuar en situaciones relativamente riesgosas», dijo el coronel y piloto de pruebas de la Fuerza Aérea italiana.

¿Podría morir durante una caminata espacial? No es probable, según la NASA, porque las aventuras fuera de la nave a menudo se cancelan en cualquier momento debido a fallas técnicas y problemas de salud.

Con información de Phys.org