SpaceX llevó al límite uno de sus propulsores más utilizados con un lanzamiento el martes por la noche desde Cabo Cañaveral, Florida.
Un cohete Falcon 9 que utilizó un propulsor por 22.ª vez logró un aterrizaje de recuperación exitoso a pesar de que se utilizó para llevar su carga útil, un par de satélites Galileo L13 de la Comisión Europea, a una órbita terrestre media. La última vez que SpaceX realizó una misión de este tipo, ni siquiera intentó recuperar el propulsor porque requería más combustible que una misión de órbita terrestre baja.
El despegue se produjo a las 6:50 p. m., hora del Este, desde el Complejo de Lanzamiento Espacial 40 de la Estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral, y el propulsor logró aterrizar en la nave no tripulada un poco más de ocho minutos después.
SpaceX tuvo que gastar un propulsor, es decir, dejarlo caer de nuevo al Atlántico, para la misión Galileo L12 en abril, de modo que SpaceX pudiera proporcionar el rendimiento necesario para poner la carga útil en órbita.
«Los datos de esa misión informaron cambios sutiles en el diseño y la operación, incluidas reducciones de masa y ajustes de trayectoria, que nos permitirán recuperar y reutilizar este propulsor de manera segura», publicó SpaceX en su sitio web antes de la nueva misión.
Sin embargo, el vuelo del martes todavía estresó al propulsor, ya que la trayectoria de reentrada significaba que soportaría un calor y una presión dinámica mayores de lo normal, dijo la compañía.
El video en vivo mostró que el propulsor alcanzó 5,430 mph antes de su combustión de reentrada para reducir su velocidad en el descenso.
«Aunque las condiciones de reentrada están en el extremo superior de las misiones anteriores, siguen siendo aceptables», afirmó SpaceX.
«Este intento de aterrizaje pondrá a prueba los límites de la recuperación, brindándonos datos valiosos sobre el diseño del vehículo en estas condiciones de entrada elevadas. Esto, a su vez, nos ayudará a innovar en futuros diseños de vehículos para hacer que nuestros vehículos sean más robustos y rápidamente reutilizables mientras se expanden a condiciones de reentrada más desafiantes».
El lanzamiento marca el tercer propulsor de SpaceX en alcanzar 22 lanzamientos y aterrizajes. Otro cohete propulsor ha volado 23 veces, pero no logró aterrizar en el 23.º aterrizaje, por lo que hasta la fecha, 22 aterrizajes exitosos son el récord. La empresa pretende reutilizar los cohetes propulsores hasta 40 veces.
Este cohete propulsor se había utilizado anteriormente en dos vuelos espaciales tripulados (Crew-3 y Crew-4), así como en dos lanzamientos de reabastecimiento de carga a la Estación Espacial Internacional, entre otros.
Este fue el 65.º lanzamiento de todos los proveedores desde la Costa Espacial en 2024, y todos, menos cuatro, fueron de SpaceX.
Con información de Phys.org
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