Utilizando el Atacama Large Millimeter/Submillimeter Array (ALMA), un equipo internacional de astrónomos ha observado un remanente de supernova conocido como LHA 120-N49. Los resultados de la campaña de observación, publicados el 3 de noviembre en el servidor de preimpresión arXiv, proporcionan información crucial sobre la naturaleza y las propiedades de las nubes moleculares asociadas con este remanente.
Los remanentes de supernova (SNR) son estructuras difusas y en expansión resultantes de una explosión de supernova. Las observaciones muestran que las SNR comprenden material en expansión que fue expulsado durante la explosión, así como materia interestelar recolectada cuando fue arrastrada por la onda de choque producida por la estrella que explotó.

Los estudios de los restos de supernovas son importantes para los astrónomos, ya que tienen un impacto crucial en la evolución de las galaxias, dispersando los elementos pesados formados en la explosión de la supernova y proporcionando la energía necesaria para calentar el medio interestelar. Además, se supone que las SNR son responsables de la aceleración de los rayos cósmicos galácticos.
LHA 120-N49 (o N49) es un brillante remanente de supernova de rayos X en la Gran Nube de Magallanes (LMC) con un diámetro aparente de unos 59 años luz. El remanente tiene una edad de unos 4.800 años y su energía de explosión se estima en un nivel de 1,8 sexdecillones de ergios.
Observaciones anteriores han encontrado que el entorno de N49 contiene nubes moleculares y cúmulos estelares jóvenes. Parece que la onda de choque de la SNR está interactuando con densas y grumosas nubes interestelares en el lado este del remanente. Recientemente, un equipo de astrónomos dirigido por Hidetoshi Sano de la Universidad de Gifu en Japón decidió emplear ALMA para investigar esta interacción.
“Llevamos a cabo observaciones de la línea de emisión de 12CO(J = 3–2) utilizando ALMA Atacama Compact Array Band 7 en el ciclo 8. Usamos 10–11 antenas del conjunto de 7 m en 2022 el 22, 27, 30 de agosto y 2 de septiembre. También utilizamos de 3 a 4 antenas del conjunto Total Power (TP) en 2022 los días 2, 4, 7, 8, 13, 17, 18, 20 y 27 de agosto”, explicaron los investigadores.
Las observaciones de ALMA han revelado distribuciones agrupadas de nubes moleculares asociadas con N49. Las nubes parecen delinear completamente el borde sureste de la capa del remanente y muestran una relación de alta intensidad de las líneas de emisión investigadas. Esto sugiere que se han producido interacciones entre nubes de choque.
En total, se han identificado ocho nubes moleculares en las proximidades de N49. La temperatura cinética y la densidad numérica del hidrógeno molecular de estas nubes indican además que fueron causadas por choques de supernova. Los astrónomos observaron que esta es la primera evidencia de nubes moleculares calentadas por choques en un remanente de supernova extragaláctica.
El estudio también encontró que cinco nubes moleculares tienen presión constante y no experimentaron evaporación por choque dentro de la existencia de N49. Lo más probable es que los otros tres se evaporaran parcialmente debido a la interacción de la nube de choque.
Con información de arXiv