La arena verde puede parecer algo extraño de encontrar en el Planeta Rojo, pero eso es exactamente lo que encontró un nuevo artículo de investigadores dirigido por un equipo de Purdue en imágenes de Perseverance.

Los hallazgos, publicados recientemente en una serie de artículos en Science and Science Advances, incluso sorprendieron a algunos de los científicos que trabajan en la misión. Mientras observaba el lugar de aterrizaje de Perseverance desde la órbita, quedó claro que el rover aterrizaría cerca de unas rocas estratificadas espectaculares en el cráter Jezero. Lo que el equipo no se dio cuenta es que estaban mirando roca volcánica en lugar de sedimentaria.
Eso puede parecer una distinción mínima, pero fue un gran descubrimiento para los geólogos que estudiaban el cráter. Los científicos esperaban encontrar rocas sedimentarias que habían sido desgastadas por el agua cuando el cráter Jezero, y Marte en general, era un lugar mucho más húmedo. Y aunque encontraron algunas rocas sedimentarias, generalmente se depositaron cerca del suelo del cráter, lo que habría sido el fondo del lago durante ese período más húmedo.

Crédito: Farley et al.
Las rocas que subían por los lados del cráter, que son las más visibles desde el espacio, eran ígneas, del tipo que se forma a partir de la lava. Además, las rocas eran mucho más antiguas de lo que esperaban. Después de observarlas en detalle con la SuperCam de Perseverance, el equipo de geología del rover se dio cuenta de que estas rocas tenían más de 4 mil millones de años.
En la Tierra, las rocas de esa edad serían erosionadas por nuestro clima. Pero en Marte son casi prístinos, lo que significa que también son más fáciles de estudiar. Cuando los científicos hicieron eso, descubrieron un color que no esperaban: el verde.

Marte es conocido como el Planeta Rojo por una buena razón: la oxidación ha formado un tinte rojo en casi todo en la superficie del planeta. Sin embargo, tras una inspección más cercana, estas rocas ígneas en realidad estaban hechas de un mineral llamado olivino. El olivino es una versión un poco menos espectacular de una piedra preciosa comúnmente conocida aquí en la Tierra: el peridoto.
El olivino también es lo que hace que las playas de Hawái parezcan verde oscuro, y tiene el mismo efecto en Marte. Pero en Marte, su edad lo hace aún más especial, especialmente como laboratorio para comprender el funcionamiento del sistema solar primitivo.
También es una ventana fascinante a cómo podría haber sido la Tierra anterior, justo cuando se formó la vida hace casi 4 mil millones de años. El medio ambiente de la Tierra de esa época se ha perdido para nosotros, cambiado irrevocablemente por el clima y la tectónica durante millones de años. Pero en Marte, el medio ambiente ha permanecido prácticamente intacto hasta que Perseverance se topó con él.
Encontrar las rocas y realizar un análisis preliminar es solo el primer paso. Además, se necesita un análisis más detallado antes de que se pueda decir algo concluyente sobre el entorno del cráter Jezero anteriormente en el sistema solar y si podría haber sido habitable. Pero ese es uno de los objetivos principales de Perseverance y su equipo de geólogos dedicados. Este nuevo descubrimiento es un paso en la dirección correcta.
Con información de UniverseToday.com